sábado, 4 de junio de 2011

Incumplimientos de contrato y sus consecuencias

Parece que llegó la segunda etapa del fin de nuestra relación. Y es que tras la asunción de la realidad toca la vuelta a la normalidad, aunque siga habiendo momentos bajos por mi parte y me gustaría creer que por la tuya también.

Ya sé que fui yo el que me salté todos los protocolos de nuestro acuerdos, aquellos de "no preguntas", "no exclusividad", "no compromiso" y "no enamorarse", mientras los cumplimos todo fue bien. Pero, y lo peor es que gente que me conoce bien e incluso una que no me conoce tan bien, me avisaron que siendo tal y como soy, no podría cumplir el 4º punto de nuestro acuerdo. Y como no cambiaré nunca eso fue lo que pasó. Y al no cumplir el 4º, empecé a no cumplir el 1º e incumpliendo éste hice todo lo posible para romper el 2º y el 3º. Y al final todo lo bonito que teníamos (si hubo algo bonito) saltó por los aires en pedazos.

Desde el momento en que ocurrió eso me ha dado tiempo a pensar mucho y darle muchas vueltas. He pensado que simplemente fui un instrumento con el que pasar el tiempo hasta encontrar al que está ahora contigo, con el que supongo que no tienes ningún tipo de acuerdo basado en 4 puntos como el que tenías conmigo, aunque también llegué a pensar que me llegaste a querer aunque sólo fuera un poco. He escuchado muchas cosas y he dicho otras tantas y al final conviene quedarse con las opiniones que vienen de fuera de mi círculo íntimo, sobre todo con las de 2 mujeres que me han ayudado bastante más de lo que ellas creen. No pienso decir sus nombres, pero si ellas lo leen se lo pueden imaginar.

Otra razón para pasar del "encoñamiento supino" (Silvia dixit) y la asunción de la realidad a la normalidad ha sido no verte, no aparecer por nuestros sitios comunes las 3 últimas semanas (a eso algunos dirán que eso se llama huir y que soy un cobarde). Y es que encontrarte produciría un efecto devastador que me haría recordar todo de golpe y echaría por tierra todo lo avanzado hasta el día de hoy...

Y con esta última frase acabo de reconocer que aún no está nada superado, que te sigo echando de menos y que me gustaría que volvieras...

2 comentarios:

Susana dijo...

Desde que te conocí --que tampoco es que haga tanto de ello-- sigo tu blog. Hasta ahora lo hacía de forma anónima; me gusta cómo escribes; me gusta tu constancia, la que me falta a mí para tener el mío mínimamente actualizado; y, sobre todo, me gusta que seas capaz de poner sobre la mesa los sentimientos de esa manera. Ánimo, que yo continuaré leyéndote. Susi.

Josín dijo...

Gracias neña. Siempre me fue más fácil escribir sobre lo que siento que decir las cosas cara a cara, ya sea por falta de oportunidades para decirlo o por cobardía. Y más que constante soy cabezón, en enero me dije "o lo borro o me lo tomo en serio" y ya ves.
Un besín