COPIADO DE LA PÁGINA DE FACEBOOK “TREINTAÑEROS A LA DERIVA”
Somos los bufones de palacio, mercenarios mal pagados, Hamlets confundidos. Somos los sastres del traje del emperador.
Somos los hijos rebeldes y bastardos de la vieja cultura popular: nuestra madre fue una "bola de cristal" y nuestro padre un comic.
Somos la generación bisagra: la última que leyó un libro; la primera que vio un ordenador.
Somos los primeros corsarios-no piratas; compartimos nuestro botín a ritmo de rock & roll, con un "botellón" de dyc, cerveza o ron, nos conjuramos y sellamos nuestra unión.
Somos religiosos sin dios, fervientes creyentes audiovisuales, humanistas callejeros: aprendimos la diferencia entre "el bien" y "el mal" viendo star wars.
Preferimos "lo político" a "la política"...lo político incorrecto, decimos casi siempre ¡no! Sin pensarlo demasiado y lo único sagrado que conocemos es el arca de indiana jones.
Somos pioneros en muchas cosas: Inventamos trabajos y oficios (dj, estilista, grafitero, tunero, coolhunter, cortometrajista, dibujante de comics, estilista, interiorista, activista, camello...)
Inventamos la drogodependencia como una nueva forma de ocio (chills, after, clubding, series...)
Exhibimos y vivimos cualquier opción sexual-legal (homosexuales, asexuales, heterosexuales, osos, furrys, lethers, sexo web, sexo en chat, matrimonio...)
Pero a la vez también somos: individualistas, postmodernistas, hiperconsumistas, nihilistas y sadomasoquistas.
Si te fijas bien estamos a la deriva, pero no perdidos...
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