Hoy hace 20 años que te conocí. Recuerdo que había salido del viejo Tartiere contentísimo tras haber ganado al Madrid con gol de Lacatus en el último minuto. Nos fuimos hacia los bares de siempre. Eran tiempos en los que aún se seguía con atención el Festival de Eurovisión, tanto que en los televisores de los bares lo tenían puesto. participaba por España Serafín Zubiri, que todavía no se había añadido el apellido. Como casi siempre, quedó de la mitad de la tabla para abajo.
Nos presentó un amigo común. Empezamos a hablar, la noche se hizo corta y al amanecer nos despedimos. Fue el primer amanecer de unos cuantos que vivimos juntos en una relación corta pero intensa y en la que yo di mucho más que tú (reconocido por ti). Tras la ruptura el bajón, comerme la cabeza, odiarte, odiarme... Y al poco tiempo olvidarte y seguir con mis correrías por la noche ovetense y gijonesa.
20 años después mantenemos el contacto esporádicamente, nos vemos, hablamos y recordamos los buenos momentos. Y sí, a veces me acuerdo de ti.
Seguro que tú no te acuerdas de la fecha y te preguntas por qué yo sí la recuerdo. Y no es ni por el fútbol, ni por Eurovisión ni porque uno de mis amigos me hubiera dicho que era el 30 cumpleaños de Dave Gahan. Lo recuerdo porque acompañándote a casa pasamos por una calle que se llamaba como aquel día...
Dicen que 20 años no es nada.
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