miércoles, 12 de diciembre de 2012

Amores callados

Ella le quería. Él la quería. Estoy seguro que hubieran podido ser felices juntos. Pero siempre había algo que les impedía expresarse sus sentimientos el uno al otro...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

su cobardía, el hecho de que el miedo al rechazo superase esa ancestral sabiduría, ese instintivo conocimiento de que en esta vida no hay segundas oportunidades, de que estaba desperdiciando un limitado cúmulo de ocasiones para mostrarle sus sentimientos. Si no era capaz de mirarla a los ojos y mostrarse tal cual era no merecía tenerla. Cobardía, y en letras mayusculas, pronunciado por su conciencia, esa voz insistente que en su cabeza le recordaba una y otra vez las sabias palabras de los clasicos: carpe diem!

Josín dijo...

Cuando el comentario es más largo y mucho más bello que la entrada original más vale añadir muy poco. Simplemente decir que, aparte del amor mútuo, esas dos personas (en este caso imaginarias) también comparten esa cobardía...