sábado, 30 de abril de 2011

Esto está siendo la misma canción


Lo malo de atravesar una buena racha en lo personal (si es que hay algo malo) es que este blog se está volviendo un coñazo, o por lo menos esa es la opinión que yo tengo, aunque nadie me lo ha manifestado, más bien todo lo contrario.

La verdad es que últimamente estoy poco inspirado y me cuesta escribir, así que soy un poco repetitivo. Necesito un motivo de inspiración de otro tipo para que el blog no sea demasiado monocorde. Esto se está convirtiendo en un sitio en el que solamente cuento cosas que pasan por las noches y el mucho bien que me hace ver a mi sobrina. Y eso no está mal, pero al final os puede cansar y no me apetece que dejéis de leer el blog.

Parece que las entradas que más os gustaron son esas dos en las que vomité todo mi rencor acumulado contra dos personas que se lo merecían. Y es que siempre se me dio mejor escribir desde ese lado, dejar que salga todo lo malo para quedarme bien conmigo mismo, supongo que nos pasa a todos.

Pensando en todo esto he llegado a la conclusión que para volver a escribir de otra manera y no repetirme necesito una motivación. O dicho de otro modo, necesito un “enemigo” que me inspire y logre sacar lo mejor y lo peor de mí, alguien que me haga esforzarme en pensar y que saque todo lo que llevo dentro, que pueda sacar toda mi ironía, sarcasmo, rencor, ira, algo negativo que muestre que puedo sacar toda mi mala leche. No es que quiera buscarme líos, pero necesito alguien brillante para que pueda brillar yo. En resumen, necesito mi José Mourinho particular.

Eso es lo que necesito. Eso… o encontrar el amor, pero creo que como no me encuentre él yo no voy a buscarlo

jueves, 28 de abril de 2011

Semana corta. De Mou ya hablaré en otra ocasión

Pues hoy iba a hablar del clásico de ayer y de los dos anteriores y, sobre todo, de Mourinho. Pero al final he decidido dejarlo para la semana que viene, después del cuarto partido y cuando esté todo resuelto. Y es que tras lo de ayer la cosa está muy calentita y alguna de mis opiniones pueden enfadar a ciertas personas que se toman las cosas muy a la tremenda. Cada vez hay menos personas con las que se puede hablar de fútbol y esas personas normalmente ni son del Madrid ni del Barça (salvo contadas excepciones)

Ha sido un jueves extraño, tanto que todo el día he tenido la sensación de que era lunes. Es lo que tiene volver al trabajo hoy en vez de el lunes como la mayoría de la gente. Tres días libres recogidos en convenio por una circunstancia especial y personal, que añadidos a los cuatro de Semana Santa han sumado una semana entera en la que hubo de todo. Ya comenté en la anterior entrada cómo fueron los cuatro primeros días, así que no voy a repetirme. 

Y entre el lunes y el miércoles, 1200 kilómetros otra vez por segunda vez en este mes y las mismas sensaciones y emociones (e incluso más) con la familia y, sobre todo, con esa cría de ojos grandes y sonrisa preciosa que me quita todas las penas cuando las tengo, cosa que cada vez pasa con menos frecuencia.

Mañana último día de trabajo de la semana y dos días y medio libres. No diré eso de que aprovecharé para descansar, que últimamente cada vez que lo digo...

domingo, 24 de abril de 2011

Un sábado estupendo

Ayer fue un día estupendo, aunque terminé agotado. Ya había comentado en la anterior entrada que pasaría el día en Luanco disfrutando de parte de la familia. Y disfruté mucho.

Salí pronto de casa y el día acompañaba para el viaje de dos horas escasas, sol y no demasiado calor. Viajé tranquilamente, con poco tráfico y escuchando la radio. Como no tenía demasiada prisa no hice el camino habitual por Tabaza, sino que me metí por Avilés y tomé la Avilés- Luanco, una carretera que cada día está peor. Ya podían arreglarla, aunque fuera sólo un poco.

Buscar aparcamiento resultó fácil, a pesar de ser Sábado Santo. Y es que aparcar en Luanco en un día soleado y en fiestas puede resultar tarea difícil, pero conociendo el lugar siempre se tienen más facilidades.

Quedar con la familia, saludar a Aitana y a Antonio y ver de nuevo a mi princesa, dormida y aún más guapa que la última vez. Llamada a Pepe y Angelines, que nos querían ver desde hace mucho tiempo. La niña se despierta, se despereza y lo primero que hace al ver gente es sonreir. Se me cae la baba.
Hablar, pasear por La Ribera, subir la Cuesta del Reloj, pararse a hablar con gente que no conocía a la nena, visita al Muelle, atestado de gente, paseo por la playa hasta el Gayo. Angelines comentando que no se podía imaginar que estuviese así con la niña... Y es que se me nota demasiado que estoy encantado, jeje.

Comer, otro paseo, helado, varios cafés, partido de fútbol, fotos, ver a más gente, comentarios sobre mi delgadez (17 kilos se notan demasiado), despedida y vuelta a San Ciprián. Se hace de noche y llueve a ratos, me gusta conducir, pero ese tipo de  circunstancias es el que peor llevo. A 10 kilómetros de casa aparece Darth Vader con su espada láser haciéndome parar. Saca un aparato tecnológico y me ordena soplar. El resultado es satisfactorio y me indica que puedo proseguir.

Llamo a Diego, salgo a tomar algo y sobre las 2 de la mañana el cuerpo dice basta. Las horas de coche, el paseo, las emociones y esa preciosidad de 4 meses me han dejado agotado. Así que me voy a casa, a la cama diciendo que mañana será otro día y que tengo que escribir algo para recordar los buenos momentos pasados y compartirlos con vosotros.

Es domingo, mañana muchos vuelven al trabajo. A mí todavía me quedan unos días y muchos kilómetros antes de reincorporarme el jueves a la vida laboral. Intentaré disfrutar y descansar lo que pueda

viernes, 22 de abril de 2011

Una semana de todo menos "santa"

Viernes Santo, pero será mejor quedarse en casa, que mañana toca visita relámpago a Luanco para disfrutar unas pocas horas de la familia. Un viernes más en casita, aunque los dos últimos días o más bien las dos últimas noches han sido intensas.

Un miércoles de cena, final de copa y más copas pero de otro tipo, un muy buen rato de risas con dos polemistas del fútbol excepcionales, como son Steaf y Paleo, uno culé y otro merengue. Leer sus discusiones futboleras en Feisbuk es garantía de sonrisas y a veces hasta de carcajadas. Al final, a casa más o menos a las seis de la mañana después de haber pasado una buena noche.

El miércoles estuvo bien, pero el jueves estuvo bastante mejor. Y es que salir a tomar una cañita antes de comer y que se te vaya de las manos (como la Copa el Rey a Sergio Ramos) suele pasar pocas veces. Además a las dos de la tarde hacía un sol espléndido y en la terraza del puerto se estaba muy bien. Así que ya que estábamos allí comimos algo y seguimos con las cañas y algún chupito. Al final el sol desapareció y terminó lloviendo, así que aparte de estar mojado por dentro también me mojé un poco por fuera. Así legaron las diez de la noche, pero a esas horas es mejor ir a cenar una hamburguesa por ahí que a casa, ¿no? Dicho y hecho, hamburguesa, cerveza y de bares, reencuentro con gente que está fuera y ha venido a pasar estos días, típico comentarios sobre fútbol y música y vuelta a casa a la hora más o menos habitual: las 6.

Pues tras dos días así y como el cuerpo ya no está para tanto trote hoy me he pasado el día en casa, he comido poco y he bebido mucha agua. En breve para la cama, mañana cojo el coche temprano, me paso el día con mi hermana, mi cuñado y mi preciosa sobrina y de noche vuelta a casa. Y de noche supongo que habrá que salir a disfrutar de la noche. Hay que aprovechar estos días, que hasta el jueves no vuelvo al trabajo...

martes, 19 de abril de 2011

Mi libertad y yo

Creo que ya lo dije alguna vez, pero como parece que hay gente a quien no le ha quedado muy claro lo repito. No tengo que justificar lo que hago y lo que no hago con mi vida, no tengo que dar ninguna explicación sobre si entro, salgo, voy o no voy, sobre lo que bebo o no bebo, fumo o no fumo, me meto o no me meto.
El único motivo que tendría para dar explicaciones sería si con mis actos hiciera daño, directa o indirectamente a alguien que me importe. SOY LIBRE Y POR ESA RAZÓN SOLAMENTE TENGO QUE RESPONDER ANTE MÍ MISMO. Y, realmente, me importan muy poco las críticas, así que no sigáis intentando joderme por ese lado, porque nadie lo va a conseguir.

viernes, 15 de abril de 2011

Treinta y tantos


Viernes otra vez. Dos días después de mi cumpleaños por fin se me ha pasado la resaca emocional que me habéis provocado alguno de vosotros, queridos seguidores. Y es que 120 felicitaciones en Feisbuk, unas cuantas en Tuenti, infinidad de mensajes y llamadas y la sorpresa de la llegada de mi madre sin avisar me emocionaron. Ya lo sé, no debería emocionarme, pero con la edad uno se vuelve sensible y cumpliendo los que cumplí a veces esas muestras de cariño afectan. En el fondo soy un blando.

No hace falta que os lo diga porque ya lo sabéis, pero os doy las gracias a todos y cada uno de vosotros, sea el que sea mi grado de relación, que con unos es más grande que con otros. Quiero decir también que algunas me emocionaron de una manera brutal, sobre todo esas que no podía imaginar que me llegasen. Solamente una de ellas, llegada hace unos minutos me ha causado indiferencia. ¿Aún no entiendes que no quiero saber nada de ti? Pero bueno, aparte de esa, encender el teléfono y el ordenador el miércoles  al llegar a casa después del trabajo se convirtió en una catarata de emociones que me llevaron casi al borde de las lágrimas.

Sí, hubo alguna ausencia de felicitación, pero sé que esas personas tienen la cabeza ocupada en otras cosas, así que no lo tendré en cuenta, jeje. Sé que vuestro olvido lo vais a compensar con creces la próxima vez que nos veamos. Y creo que os contesté a todos, si de alguno me olvidé lo siento.

En resumen, gracias a todos, si vuestra intención era hacerme sentirme querido lo lograsteis de un modo inimaginable

martes, 12 de abril de 2011

Amor

Pasión y frialdad, sensualidad y sexo opaco, ambición y generosidad, posesión y desprendimiento, adoración y desprecio, simpatía y odio, abnegación y denuncia, ternura y sufrimiento, placer y dolor, lo más sagrado y lo más profano, vanidad, humildad, obsesión y olvido.

El amor es el único estado sentimental que es capaz de ser eterno sólo por unos segundos y luego pasar a convertirse en su contrario eternamente.

El amor son todas y cada una de las emociones que dos personas pueden generar, excepto la indiferencia.

domingo, 10 de abril de 2011

Hasta que el cuerpo aguante

Llega un momento en que los excesos se empiezan a pagar, que sales una noche y, pensando que tienes 20 años en vez de casi el doble, haces lo mismo que hacías antes y al final el cuerpo pasa factura, pasándote 2 días recuperándote. En ese momento te empiezas a plantear salir menos o no salir, beber menos o no beber... hasta que al siguiente fin de semana te dejas liar.

Esta reflexión viene a cuento porque el viernes, en la última entrada publicada escribí lo siguiente:"Supongo que saldré a dar una vuelta y tomar algo, después prontito para casa, vamos, lo de cualquier fin de semana. Aunque siempre salgo pensando lo mismo y siempre se lía la cosa.". Pues la frase fue toda una premonición. Y fue una buena noche, con buena gente, encuentros y reencuentros, conversaciones interesantes y muy larga, aunque se me hizo corta. Al final, llegada a casa a las 11:30 de la mañana bajo un sol de justicia y sábado en la cama. Y aunque como ya dije, con esta edad que tengo ya tengo que pasarme 2 días recuperándome, espero repetir una noche así con esa misma gente. Sois de lo que no hay.

Día de reflexión, tengo que plantearme salir menos, o eso pienso a veces. Pero al final siempre llego a la misma conclusión: ¿Para qué? Si no tengo que rendir cuentas a nadie, seguiré haciendo lo que me gusta hasta que el cuerpo aguante.

viernes, 8 de abril de 2011

Sin planes

Llega otro viernes, otro fin de semana más y no tengo demasiados planes. He llegado al final de la semana laboral muy cansado, incluso ayer me fui a la cama sobre las 10 de la noche, algo que hacía mucho tiempo que no hacía. Puede ser que esté notando la paliza kilométrica del fin de semana pasado cuando fui a ver a la familia.

La semana ha sido buena, sobre todo en lo climatológico, se agradece el solecito de estos días para dar un paseo con los cascos puestos, aunque los últimos días han sido unos paseos más cortos de lo habitual por culpa de mi dolorida rodilla izquierda, esa que tantos problemas me da cada cierto tiempo. Esta vez lo achaco a los esfuerzos sobre la bici estática, que por otra parte me está haciendo tener un tipín espectacular (jajaja). Y como esta tarde había poco que hacer he aprovechado para cortarme el pelo, la rapada habitual al dos. Y también pensé en ir a lavar el coche, pero como siempre que lo hago termina lloviendo he decidido esperar, no es cuestión de fastidiar este solín tan guapo.

Ahora llega la hora de pensar qué hacer este fin de semana, sobre todo por las noches. Supongo que saldré a dar una vuelta y tomar algo, después prontito para casa, vamos, lo de cualquier fin de semana. Aunque siempre salgo pensando lo mismo y siempre se lía la cosa.

Y en unos días, Semana Santa, días días de descanso que lo más seguro se alarguen a siete por alguna circunstancia especial. Y en mayo otros cuatro que aprovecharé para visitar a Eneko y Garrutxo y ver a Dixebra tocando en Madrid... Ya os voy avisando, luandrileños y demás fauna que habita la capital estatal...

miércoles, 6 de abril de 2011

Un día normal

A veces 15 simples minutos de conversación con un buen amigo sirven para desahogarte y descargar todo lo que ocupa tu cabeza durante toda una semana. Un buen paseo mientras escuchas música te hace recapacitar sobre muchas cuestiones. Media hora de bicicleta estática tras el trabajo y el paseo te terminan de agotar físicamente y una buena ducha caliente te termina por curar todas las heridas de un día como los demás. Solamente queda una ligera cena, un buen partido de fútbol o una buena película y tras ello, marcharse a la cama para que cuando mañana suene el despertador estés completamente reparado.

Sí, hoy ha sido un día normal

domingo, 3 de abril de 2011

1200 kilómetros y pilas cargadas


Salir de trabajar un viernes, actualizar tu situación sentimental en el Facebook un 1 de abril para festejar el April Fools Day y que muchos amigos piquen (ya que algunos festejan Halloween, Santa Claus, u otra tradiciones anglosajonas, incluso el Día de la Marmota, me  permití esa pequeña broma) y hacerte 600 kilómetros para dar una sorpresa a mi madre con la complicidad de mi hermana y mi cuñado no tiene precio. Y pasar un fin de semana relajado con la familia y con mi maravillosa sobrina es lo mejor que me ha pasado en los últimos meses.

La niña ha cambiado mucho, está grande, guapísima y se pasa el día riéndose y observando a su alrededor con sus inmensos ojos azules. Y los adultos le hacen todo tipo de “perrerías” para sacarle alguna foto “simpática”: este fin de semana tocó hacerle fotos con una marañuela en la mano, que inmediatamente se llevaba a la boca, aparte de todo un book de fotos conmigo, en las que salgo con cara de bobo. Y es que se me cae la baba. Por cierto, siempre que recibo fotos de ella digo que es guapísima, pero es que al natural gana muchísimo… Pero qué voy a decir yo.

Así que el sábado tocó relax, paseo, mirar embobado a la niña y ver el Madrid- Sporting narrado por unos comentaristas argentinos. Y aunque sea del Oviedo, me alegré muchísimo de la victoria gijonesa, por ese gran entrenador que tienen (Manolín, te tenían que hacer un monumento), por bajar los humos de Jose Mourinho y sobre todo por todos mis amigos sportinguistas. Y sí, celebré el gol, sobresaltando a la cría y llevándome la reprimenda de mi madre.

Y hoy vuelta a San Ciprián, otros 600 kilómetros con tramos con lluvia y poco sol, no como el viernes, un día estupendo y de calor en el que el termómetro del coche llegó a marcar los 30 grados.

A pesar de la paliza kilométrica no estoy cansado en absoluto, todo lo contrario, el fin de semana me ha servido para tener las pilas cargadas para las semanas venideras. Mañana vuelta al trabajo, esperemos que la semana sea tranquila.